EL ORDEN DE LOS FACTORES SÍ ALTERA EL PRODUCTO

Queda menos de un mes para que la JSC celebre su duodécimo congreso nacional. Creo que como militante, es necesario que hagamos unas cuantas reflexiones sobre nuestra propia organización desde tres dimensiones diferentes: Ideológica, Orgánica y Territorial. Es necesario que este debate no solo se haga en determinadas esferas y a puerta cerrada, sino que se haga también desde las bases y a puerta abierta. La JSC, como organización, se juega mucho en todo este proceso. La Credibilidad y la solvencia política estarán en juego.

La primera reflexión que nos debemos hacer es sobre qué queremos ser y como queremos actuar, es decir, tenemos que decidir que "dosis" de ideología es la que queremos poner en circulación en nuestra organización. Desde Sant Cugat hemos querido una organización muy ideológica, tanto es así que pensamos que abanderar el discurso republicano nos abre un gran abanico de acciones políticas y lo que es más importante puede ser nuestro "significante" político. Tal y como dijo Allende "no se puede ser joven sin ser rebolucionario", debemos decidir por tanto que significado tiene para nosotros el ser revolucionarios. Por otro lado el tener una organización con grandes dosis de ideología nos permitirá tener a unas bases con gran capacidad de movilización, un ejemplo sería nuestro nivel de participación en el día internacional del trabajador. Como organización socialista debemos ponernos en un tema tan importante como es el empleo para el futuro de los jovenes. Por tanto debemos consensuar cual será nuestro nivel ideológico el cual nos ha de delimitar y quiar nuestro discurso y cultura política en relación a nuestras acciones políticas en los diferentes ámbitos y grupos sociales.

Otra de las reflexiones que nos hemos de hacer es de carácter orgánico, es decir, como debemos articular nuestra organización. Esta articulación (canales de comunicación, toma de decisiones, coordinación entre federaciones y agrupaciones, etc.) vendrá definida por la cultura política y esta a su vez por el nivel de ideología que hayamos decidido. A mayor ideológía, mayores deberán ser los canales de comunicación para definir el discurso político y su respectiva acción política. Nuestra organización ha de permitir que las relaciones entre federaciones, incluso nuestra relación con la JSE ( Juventudes Socialistas de ESpaña) sean crecientes, con el único fin de que la militancia se movilice para hacer política. Este debate es fundamental, porque obtenemos la relación directa entre la dimensión de la organización y su expansión territorial. Ambos factores definirán nuestra capacidad para marcar la agenda política.

La última relfexión que hemos de hacer es sobe la extensión territorial, es decir, la presencia en el territorio que ha de tener nuestra organización. Por inercia se diría que la mayor, y la verdad es que no estaríamos equivocados, pero para que eso se cumpla es necesario tener un elevado conocimiento de la realiadad territorial. Este conocimiento no debería estar solo en el conocimiento de la cúpula de la organización, deberá estar en el conocimiento del conjunto de la organización. Como siempre digo ellos son nuestro mejor altavoz. Para una buena extensión territorial es necesario dar a conocer nuestro discurso político en los formatos pertinentes en cada lugar y en cada momento. Se ha de trabajar para conseguir que a un militante de Reus le sea indeferente hacer política en Reus que en Sant Cugat del Vallés y viceversa en un momento dado.

Podríamos establecer la siguiente relación: una mayor coordinación nos dará una mayor movilización y esta a su vez una mayor presencia y estensión territorial.

Creo que debemos plantearnos estas reflexiones i debatir en torno a ellas para dar respuesta a quien deberá encabezar los próximos años y los retos futuros. Debemos encontrar quien es el que da mayor rrespuesta a estas reflexiones y en que orden. Yor por mi parte lo tengo claro.

David Gutiérrez